Tras la aplicación de un plan estratégico de controles sobre desarmaderos y comercios específicos por parte del Gobierno de Santa Fe, el robo de cables en Rosario se redujo en un 93% entre 2024 y 2025. En la ciudad de Santa Fe, la baja alcanzó el 83%, según datos oficiales comparativos de los últimos dos años.

La reducción se vincula a un esquema integral de fiscalización sobre desarmaderos, chatarrerías y comercios de metales, que incluyó:

• Clausuras de establecimientos irregulares.
• Control de la trazabilidad del material.
• Coordinación operativa con fiscalías y fuerzas de seguridad.

El objetivo central fue desarticular los circuitos ilegales de compra y reventa que sostienen este tipo de delitos. El relevamiento provincial muestra impactos directos sobre dos problemáticas urbanas sensibles: el robo de cables y el robo de metales, ambos asociados a cortes de servicios esenciales y daños a la infraestructura pública.

Rosario: fuerte caída del robo de cables y de metales

En Rosario, el informe registra una caída del 93% en el robo de cables y una reducción del 86% en el robo de metales entre 2024 y 2025. Los operativos permitieron cerrar puntos de reventa ilegal y bloquear el circuito de comercialización que volvía rentable el delito.

Como resultado, se recuperaron tramos de infraestructura eléctrica y de servicios que permanecían fuera de funcionamiento, especialmente en zonas que registraban reiterados episodios de vandalismo y sustracción de materiales.

Ciudad de Santa Fe: descensos sostenidos en ambos delitos

En la capital provincial, los datos también reflejan una baja pronunciada: 83% menos robo de cables y 80% menos robo de metales en el mismo período. El esquema de fiscalización continua incluyó:

1. Inspecciones periódicas.
2. Clausuras preventivas.
3. Control estricto de la trazabilidad del material en chatarrerías.

Estas acciones buscaron ordenar la actividad comercial del sector y reducir los puntos críticos vinculados a cortes de servicios e incidentes recurrentes en la vía pública.

Incautaciones y control del mercado ilegal

Durante los últimos dos años, los operativos realizados por la gestión provincial en desarmaderos y chatarrerías permitieron incautar más de 2.000 toneladas de materiales, evitando su reingreso al circuito ilegal. En paralelo, se amplió el registro formal de establecimientos habilitados, reduciendo los márgenes de informalidad que alimentan el mercado clandestino de metales y autopartes.

Además, los datos consolidados muestran una disminución de los reportes por cortes de servicios esenciales y una baja de incidentes vinculados a vandalismo, según registros de sistemas de emergencias y empresas prestatarias.