Este mes de junio, Crucijuegos inaugura en Alto Rosario un innovador espacio para que disfrute la familia, en un espacio que ocupó durante muchos años el Museo de los Niños, en uno de los ingresos al shopping.

Este espacio, ubicado estratégicamente junto a una de las áreas de estacionamiento, está diseñado para que grandes y chicos vivan una aventura intergaláctica. Con una propuesta distribuida en tres pisos y más de 2.000 metros cuadrados, invita a disfrutar de una experiencia con temática espacial, ideal para jugar a ser astronautas por un día.

Cómo será el mega espacio de Crucijuegos en Alto Rosario Shopping

Este espacio lúdico va a contar con ValoArena: el primer juego de realidad mixta en Rosario. Lo innovador de este dispositivo es que el entretenimiento funciona sin necesidad de gafas ni equipamiento. El ValoArena permite hasta 6 jugadores y es de movimiento libre. Además el espacio va a disponer de máquinas de realidad virtual de última generación así como juegos modernos que caracterizan nuestros centros de entretenimiento.

La propuesta también contará con tres salas de cumpleaños, diseñadas bajo la misma temática y listas para recibir a quienes quieran festejar a lo grande. La propuesta se completa con un bar que cuenta con servicio gastronómico para toda la familia. En el hall central se destaca un imponente mangrullo de 9 metros de alto en forma de cohete, con toboganes que desembocan en una gran pileta de pelotitas.

La propuesta apunta a mostrar el universo amplio de Crucijuegos, pensado para todas las edades y necesidades permitiendo que grandes y chicos se diviertan por igual y jueguen a ser astronautas que exploran y descubren un espacio de otro planeta.

«Desde Cruci, queremos que quienes visiten Alto Rosario puedan ver en primera persona la calidad, el diseño y la diversidad de nuestros productos. Esta fusión refleja lo que somos: una empresa con mirada integral sobre el juego, la innovación y la experiencia lúdica», dijeron desde la empresa.

La experiencia se adapta a todas las edades, invitando a soñar, jugar y reconectar con el placer del juego compartido, porque cuando el juego se piensa en serio, la seguridad no se negocia: cada estructura, máquina y espacio cumple con los más altos estándares de fabricación y control.