Durante años fue uno de los emblemas de la movida cervecera en Rosario. Pero los tiempos cambian, y también los gustos. En el inmueble de Cochabamba 1332, el equipo detrás de la extinta Baum apuesta ahora por una fórmula diferente: menos cerveza y más vino. Así nace Charmat, un bar que pone el foco en los espumantes y la cocina con carácter.

El cambio de rumbo no es improvisado. Tras probar suerte también con una propuesta de pizzas, los dueños del lugar decidieron relanzar el espacio con un concepto que hable de vinos y bodegones, de platos clásicos y abundantes, de ambientes más cálidos y cómodos. El nombre remite al método italiano para elaborar espumantes, un guiño directo a la columna vertebral de la carta.

El local está en plena obra de reconversión. Desaparecen las banquetas altas, aparece un mobiliario más pensado para largas charlas y cenas compartidas. La cava se vuelve protagonista, con etiquetas que van desde grandes bodegas nacionales hasta pequeños productores boutique.

La apertura está prevista para julio. El nuevo espacio buscará diferenciarse en un mercado gastronómico cada vez más competitivo, apostando por una experiencia menos efímera y más sensorial.

Desde la ambientación hasta el menú, todo en Charmat busca contar una historia. Y en esa historia, el vino será el gran narrador.